Escapando

Clonazepan que cae en gotas sobre el asfalto, sobre el diluvio que ya no moja nada.
Carteles borrosos y la luz rápida y furtiva se inclina como un alfombra. Desnudo inhalo el fervor de juventud y mis terminales se reactivan en medio del gentío en una terminal atestada de viajantes y punguistas.
No queda recuerdo alguno del dolor que me quemaba las venas hace instantes, no queda vida detrás de mi mirada.
Mecánicamente me siento en mi lugar y con gafas oscuras puestas, resuenan en mí canciones que me recuerdan a ella, sin darme cuenta del dolor sonrío al fin.
El sueño me atrapará hasta el destino, donde con ayuda bajaré del micro, me pondrán en un taxi y balbucearé la dirección.

Que te pasó pibe?

El amor duele...